Recientemente tuve la oportunidad de intervenir en el 68 Congreso Internacional de Acodal: Agua, Saneamiento, Ambiente y Energía Renovables que se llevó a cabo en Cartagena el pasado 7 de mayo.
Las urbes juegan un papel muy importante y decisivo en la gestión de recursos hídricos, energías renovables y sostenibilidad, por eso, los gobernantes, la academia y el sector privado deben trabajar en la educación y formación de talento y de la misma ciudadanía, así como en identificar oportunidades para innovar en el financiamiento climático.
La gestión climática requiere recursos, tanto humanos como financieros para poder impactar en la reducción de emisiones de gases contaminantes, el mayor aprovechamiento de los residuos y el control de la erosión costera, por mencionar algunos ejemplos.
Las ciudades tienen retos y desafíos, pero sobre todo, muchas oportunidades para convertir a la naturaleza en su aliada para el crecimiento económico sostenible.
¡Háganlo, actúen, y verán los resultados!